Adaptación basada en Ecosistemas para las comunidades de las planicies inundables de la cuenca del río Magdalena

La cuenca del río Magdalena ha sido reducida históricamente para soportar el desarrollo económico. Esto ha dejado impactos significativos en el medio ambiente. Adicionalmente, la cuenca ha mostrado una gran vulnerabilidad a los eventos climáticos extremos. Las inundaciones causadas por La Niña de 2010 y 2011 afectaron más de 2,2 millones de personas, solo en las áreas de planicies inundables.

Se espera que estos eventos se vuelvan más frecuentes e intensos debido al cambio climático. Por eso es importante mejorar y mantener los servicios cruciales que provee esta cuenca a los colombianos. Es necesario hacerla más resiliente y adaptable a la variabilidad y al cambio climáticos.

En un esfuerzo multilateral, TNC contribuyó con sus aliados a implementar medidas de adaptación basada en ecosistemas (ABE) en los humedales y planicies inundables del río más importante del país. Este proyecto trabajó con comunidades locales y autoridades ambientales regionales de la cuenca del río Magdalena.

La cuenca del Magdalena cubre el 24 % del territorio nacional, pero es el hogar del 77 % de la población. Alrededor de 32,5 millones de personas viven en tierras bañadas por el río.

El proyecto se implementó entre septiembre de 2015 y junio de 2019. Uno de sus esfuerzos apoyó las autoridades ambientales a niveles nacional, regional y local, integrando la gestión de cuenca. Este proceso ayuda a maximizar los beneficios sociales y económicos del río Magdalena mientras conserva y restaura los ecosistemas. Además, el proyecto promueve medidas de adaptación basada en ecosistemas en los instrumentos públicos de planeación y gestión económica.

Estos esfuerzos fueron un logro significativo para prevenir serias pérdidas socioeconómicas relacionadas con el cambio climático, manteniendo un ecosistema de río más resiliente tanto para la gente como para la naturaleza de la cuenca del río Magdalena.

Adaptación basada en Ecosistemas (AbE)

Es un enfoque de conceptos y procesos que promueve el uso de la biodiversidad y los servicios de los ecosistemas para ayudar a las personas a reducir los efectos adversos de la variabilidad y el cambio climáticos. Busca reducir la vulnerabilidad a eventos climáticos en comunidades ligadas a ecosistemas y los servicios que estos prestan para la vida.

¿Por qué implementar el enfoque AbE?

·         Ayuda a que las personas se adapten mejor a los eventos climáticos.

·         Es menos costoso que otras alternativas de infraestructura o tecnología.

·         Fomenta la participación de las comunidades y sus saberes.

·         Genera beneficios sociales, económicos, culturales y ecológicos a largo plazo.

·         Aporta a la mitigación del cambio climático al reducir emisiones de GEI.

·         Interviene a escala local con impactos positivos a mayor escala.

Conceptos clave para entender la AbE

Variabilidad climática

Oscilaciones del clima en periodos de años y decenios.

Cambio climático

Es una variación importante en el clima por el aumento de la temperatura consecuencia del calentamiento global. Se manifiesta en la variación de los climas en el mundo.

Adaptación al cambio climático

Proceso de ajuste al clima real o proyectado por el cambio climático, y sus efectos.

Ecosistema

Complejo de comunidades de plantas, animales y microorganismos y el ambiente donde interactúan, que constituye una unidad funcional (por ejemplo: un bosque).

Servicios ecosistémicos

Procesos y funciones de los ecosistemas que son percibidos por los seres humanos como un beneficio, directo o indirecto. Hay servicios ecosistémicos de provisión (como alimento, agua, o madera), regulación (del clima, de inundaciones, o purificación del agua) y culturales (religiosos, económicos, educativos).

Socioecosistema

Un sistema coherente de factores biofísicos y sociales que regularmente interactúan de una manera resiliente y sostenible.

Resiliencia ecosistémica

Capacidad de un socioecosistema de absorber disturbios y reorganizarse mientras mantiene sus funciones, estructuras, identidad y retroalimentación.

Caso de aprendizaje

Implementar las medidas de ABE trajo impactos positivos a la comunidad de la ciénaga de El Sapo, en Nechí, Antioquia. La construcción de viveros comunitarios ha empoderado a las mujeres del grupo guardaciénagas, quienes ahora tienen una entrada económica adicional gracias a la venta del material vegetal a actores que desarrollan sus actividades en esta zona, como los mineros, promoviendo la restauración del ecosistema. Además, ellas ofrecen los servicios de restauración gracias a las capacitaciones que han recibido en el tema. Esta experiencia es prueba del alcance a niveles territorial y ecosistémico que puede tener la implementación de proyectos con enfoque de Adaptación Basada en Ecosistemas.

Los aliados del proyecto

• The Nature Conservancy Colombia
• IKI (International Climate Initiative of the German Federal Ministry for the Environment)
• BMU (Nature Conservation and Nuclear Safety)
• Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia
• Ideam (Instituto colombiano de hidrología, meteorología y estudios ambientales)
• Fundación Alma